VF es el blog de opinión y análisis de Pablo Muñoz

lunes, 31 de diciembre de 2012

Decisión necesaria, futuro incierto

Existía un acuerdo general acerca de la necesidad de destituir a José Luis Oltra. Sin embargo, la torpeza con que el club ha llevado a cabo la maniobra y la letra pequeña de la operación abren más incógnitas de las que despejan.

Lentitud
El hecho de que el club haya tardado semana y media en comunicar el cese del técnico ha debilitado la imagen que proyecta el consejo de puertas afuera, alimentado las especulaciones acerca de su capacidad en el estado actual de la entidad. Pero sobre todo ha minimizado el "efecto reacción" que el entorno esperaba y el vestuario necesita y ha retrasado la puesta en marcha del nuevo proyecto.

Mendes
La influencia de Jorge Mendes en la llegada de Domingos Paciencia, tras el pobre rendimiento de varios de sus representados, se interpreta más como un signo de intervención externa del club que como el buen samaritano que ayuda al desfavorecido. El cruce de declaraciones entre Bahía y Gestifute da alas a las teorías que hablan de presiones por parte del portugués para la destitución de Oltra. Del mismo modo, pone en tela de juicio la idoneidad de Paciencia, con una escasa trayectoria en los banquillos y sin experiencia como técnico en la Liga.

Vestuario
El origen geográfico y empresarial de Paciencia implica un hándicap para el ex del Sporting Braga. Deberá moverse con pies de plomo si no quiere que se le acuse de favoritismos. La higiene del vestuario está en juego y sus decisiones se analizarán con lupa.

Táctica
El club apuesta para sustituir a Oltra por un técnico cuya propuesta se aleja del manual que ha seguido la plantilla desde la llegada del valenciano. Los jugadores deberán asumir un drástico cambio de discurso, abandonando la presión adelantada y la posesión por el repliegue y el contragolpe. El margen para adaptarse al nuevo libreto es estrecho y la urgencia, máxima.

Fichajes
Mendes no puede permitirse un tropiezo de Paciencia en su primera aparición en el escaparate de la Liga. Sin la llegada de refuerzos, se arriesgaría a que la mediocridad de la plantilla se revele como la razón fundamental de los 12 puntos que suma el Dépor; Oltra quedaría exculpado y el agente portugués doblemente señalado por la calidad de sus jugadores y su técnico.

viernes, 21 de diciembre de 2012

Sin fútbol, sin alma, sin futuro

Es hora de cambiar. El manual de Oltra se demuestra agotado jornada tras jornada. Los rivales saben cómo ganar al Dépor y acaba ocurriendo. Es un equipo demasiado fácil de descifrar y por eso está último. Y no hay síntomas de recuperación.

El técnico, incapaz de matizar su propuesta o de articular una nueva, reincide en el suicidio bienintencionado de cada semana. Insiste en apretar la salida del rival con jugadores que apenas intuyen el significado de la palabra sacrificio. Sin una presión efectiva, las facilidades se completan con unos centrales demasiado lentos como para vivir a 30 metros de su propia portería y unos laterales con serias dificultades para interpretar las coberturas defensivas a la espalda.

En ataque, no hay fútbol por dentro ni amplitud por fuera. Ante defensa estática no hay soluciones y el contragolpe no se maneja bien. El balón parado apenas sirve para montar contras del rival. Un rosario de problemas coronado por la impresión de equipo roto, sin empuje colectivo, que anoche ni siquiera fue capaz de morir colgando balones al área, en el que cada uno pierde la guerra por su cuenta. Nada, ni siquiera un grito, una patada.

El equipo necesita un cambio. Si Oltra no tiene capacidad o voluntad para dárselo, la pelota está en el tejado de Lendoiro. Con todo, el Deportivo está ya abocado a un esfuerzo superlativo en lo que queda de Liga para tener horizonte, al menos un año más.

martes, 18 de diciembre de 2012

Oltra busca

Al filo del abismo, Oltra está mostrando un perfil más determinante. Acostumbrado a tomar decisiones de puntillas, solo cuando le vienen dadas por lesiones o sanciones, anoche aparcó las formas, consciente del fino hilo que le sujeta al banquillo de Riazor. Cruzó la línea y abrió debates con la brusquedad propia del que se sabe sin tiempo.

La primera decisión fue cargarse a Juan Domínguez. Quiso Oltra castigar al jugador pero el daño lo sufrió el equipo. Costó cara la reprimenda, viendo a un Dépor sin brújula en la medular, con Álex extrañamente desconcentrado y Abel sin sentido táctico ni acierto con el balón. Sin Zé Castro, único defensa capaz de alumbrar una jugada desde atrás, el peso constructivo recayó en exclusiva sobre Valerón, que está para misiones más modestas, complementarias más que protagonistas. Así, el Deportivo se movió a base de espasmos, sin continuidad ni plan a seguir.

En otra de las decisiones de Oltra se adivina una pista futura. El cambio de posición de Pizzi en la segunda mitad, ocupando el lugar de Valerón, significa terminar con el estatus de intocable del Flaco - faltaba aún media hora - y buscar acomodo al portugués, desesperante pegado a banda. La vuelta de Salomâo permite al técnico, si lo desea, sentar al 21.

También brusca fue la titularidad de Germán Lux. Es tan cierto que Aranzubía no es el culpable de la sangría defensiva como que el argentino pedía paso. Igual de indiscutible resulta que, en otras circunstancias, habría pesado más el tacto de no señalar a Dani que los méritos del aspirante.

Pero al margen de individualidades, el principal cambio fue táctico. Oltra programó para la cita al Dépor más contenido de la temporada. Una concesión de la ortodoxia que debe completar con un contragolpe digno. Sin automatismos para aprovechar los espacios, el Deportivo será un equipo sin identidad, con miedo a dominar para no exponerse en exceso pero sin argumentos para hacer daño a través de la velocidad. Y en Cornellá hará falta un plan.

lunes, 17 de diciembre de 2012

Juan Domínguez, otra vez

Juan Domínguez fuera de la convocatoria. El canterano, frágil condición, siempre obligado a más, cede su puesto a un André Santos inédito y al que incluso había pasado por la derecha Jesús Vázquez, ahora también desaparecido.

Antes de mandarlo a la grada, en apenas un tercio de Liga Oltra ya había señalado a Domínguez en dos ocasiones. Ni la primera ni la segunda mejoró el Dépor. El entrenador, que quiere tener la pelota, elimina al mediocentro más dotado para guardarla y servirla en condiciones. Sin él, le falta la pausa a un equipo cansado de perder balones en transiciones sin criterio convertidas en contras del rival. Pérdidas que defiende la mitad del equipo porque la otra mitad solo compra el billete de ida. Casi todos los que no vuelven habitan la línea de ataque tras el delantero. Son el club de los intocables. Tres puestos de saldo, dadas la lesión de Salomâo y la decepcionante aportación de Camuñas. Se crucifica a la defensa y al portero, nuevo culpable preferido, pero el origen del correcalles que mata al Deportivo es el centro del campo.

No se trata de discutir la valía de Abel Aguilar. Es más jugador que Bergantiños y Domínguez. Sin embargo, las parejas en las que participa el colombiano se han revelado peores que la formada por los gallegos. No mezcla y termina siendo un verso libre con una función que cuesta identificar, perdido en un derroche de kilómetros que solo a veces sirve para llegar a tiempo.

viernes, 14 de diciembre de 2012

Sin excusas

El deportivismo contiene el aliento. El partido del lunes huele tanto a final que hasta los más reacios a los titulares se saltan el manual de los vetos y le confieren, en diciembre, tal calificativo. El pánico al precipicio, que se adivina en la siguiente curva, ha logrado que hasta Hacienda y el embargo guarden turno en la sala de espera de los "trending topic".

Jugadores y entrenador llegan a la cita señalados por igual; la diferencia es que el técnico podría jugarse el puesto. Lo hará muriendo con sus ideas. No habrá cambios de dibujo ni revoluciones en el once. A lo sumo, variaciones en el grado de intensidad defensiva.

Pocos replican al valenciano sus alineaciones, sin embargo la lupa está asegurada para los cambios. Su gestión del riesgo ha sido discutible. En Granada y Vigo quiso amarrar el resultado en partidos en apariencia más fáciles de desequilibrar mientras que ante el Betis pecó de ansioso con el relevo de Bodipo. En general, el banquillo ha aportado poco con el partido en marcha. Es cierto que los recursos disponibles han sido en ocasiones más bien limitados.

Por fortuna, el técnico dispone para esta final de todos los jugadores con algo que decir en esta campaña, recuperados Zé Castro, Marchena, Aythami, Pizzi y Nélson Oliveira, y con Salomâo también integrado desde la semana pasada. No hay, por tanto, margen para la excusa. Ni siquiera cabrá en esta ocasión agarrarse a la lógica perversa de echar de menos a los que no están, que siempre son mejores cuando faltan pero piden banquillo cuando juegan.

No habrá pretexto para el técnico pero tampoco para los futbolistas. Si creen en el "estilo" deberían esforzarse en que los demás también lo hagamos porque tal vez no queden muchas bolas de partido que salvar. Al fin y al cabo, su nombre también está en entredicho. El debate sobre la calidad de la plantilla se ha abierto y el paraguas de Oltra no durará para siempre.

martes, 11 de diciembre de 2012

Las verdades a medias de Antonio Sanz

¿Tiene razón Antonio Sanz en la evaluación de los fichajes del Dépor vía Mendes? Probablemente. ¿Son declaraciones interesadas para ocultar otras verdades? Seguro.

La primera consideración necesaria acerca de la política de fichajes del Deportivo es que es la más condicionada de su historia moderna. Asfixiado por una situación económica que ha terminado con un embargo total de los ingresos de la entidad, la pregunta es si era posible otra planificación deportiva. ¿Podía el Dépor permitirse renunciar a la cartera de jugadores de Mendes?

Resulta sorprendente, por otra parte, que un perfecto conocedor de los asuntos de trastienda como Antonio Sanz ponga el grito en el cielo porque Mendes, en el pack que mandó a Riazor, incluyese un poco de todo; Tiago Pinto o Roderick son el precio que hay que pagar por contar con Nélson Oliveira o Salomâo, igual que en su momento Mauro Scaloni fue futbolista gracias a su hermano Lionel. Quid pro quo.

Asumiendo que no todos los representados de Mendes están a la altura, Sanz podría preguntarse si lo está el entrenador que los dirige. No se observa evolución alguna en el Deportivo de Oltra. Los errores que lastran al equipo son los mismos que en el mes de agosto. Los mismos que el año pasado en Segunda. Los mismos que en el Tenerife que descendió como equipo más goleado. Incapacidad o tozudez, resultados al fin y al cabo. Valga la calidad de la plantilla como atenuante, pero no como eximente.

viernes, 30 de noviembre de 2012

Previsible

La velocidad es el factor diferencial en el fútbol. Atacar rápido, ya sea en ataque posicional o al contragolpe, exige una adecuada combinación de destrezas individuales y colectivas. Se necesita capacidad técnica con el balón, mecanismos de ocupación de espacios y, sobre todo, inteligencia en la decisión.

Pizzi, regate vertiginoso, escurridizo en la carrera y exquisito técnicamente, nunca será tan rápido como un control orientado y un pase al espacio. El portugués parece empecinado en rebajarse a chupón de recreo y tirafaltas. Solo busca al compañero cuando la opción individual se agota. Lo deseable sería recurrir a la acción personal solo cuando se agota la opción colectiva. El exceso de conducción amputa los ataques propios convirtiéndolos en contras del rival.

Obviamente, los defectos de Pizzi y otros futbolistas, por más notorios que sean, no son el único problema del ataque blanquiazul. Además de velocidad, el fútbol necesita variedad. El contragolpe, secuestrado por el estilo, es un arma de enorme valía que el Deportivo no domina. Y debería, teniendo en cuenta que cada partido que pasa reduce su posesión, incapaz de imponer su planteamiento. El balón en largo, precisamente principal argumento para desmontar al Dépor, ha quedado degradado a la categoría de recurso defensivo también víctima de la ortodoxia autoimpuesta.

Sin una mayor velocidad y variedad, el Dépor de Oltra es un equipo previsible, hipotecado a cazar puntos a golpe de chispazos de talento. Tal vez no baste.

miércoles, 28 de noviembre de 2012

El Capello de Utrera

Joaquín Caparrós llegó al decadente Deportivo post Champions con la misión de inyectar adrenalina a una plantilla con más pasado que futuro. Se trataba de marcar un cambio de ciclo, de estrenar traje nuevo, de mudar de estilo para encontrar la ilusión. El de Utrera se llenó de teatralidad para vender un proyecto basado en la intensidad, la mentalidad colectiva y la cantera.

La grada compró el discurso deslumbrada con la excitante promesa de un equipo de gladiadores salpicado de los Reyes, Navas o Capel en versión herculina. El técnico andaluz se inventó las pretemporadas "army style" con tres sesiones diarias, pulsómetros y papillas mágicas del doctor Escribano y sustituyó el "bos días, buenos días" de Jabo Irureta por el chascarrillo sureño. En definitiva, el club se apartó del pasado cuanto pudo.

La distancia con su predecesor pronto se haría patente también en los despachos. De la mano izquierda de Irureta se pasó a las turbulentas salidas de Scaloni y Tristán; de la discreción del irundarra, a las rajadas públicas de Caparrós; de la fidelidad del vasco, firmando año a año, al intento de espantada del utrerano a Osasuna. El perfil por el que fue contratado se volvió en contra de su continuidad y provocó un nuevo cambio de ciclo.

El ruido general alrededor de cuestiones extradeportivas sirvió para alejar del primer plano el debate sobre las carencias futbolísticas del manual caparrosiano. Un ideario que en el Ono Stadi presencia cada domingo menos público y que se cruza ahora en el camino copero del Dépor. Una propuesta que, visto lo visto en Liga y la ida de Copa, nadie echa de menos en la grada de Riazor.

martes, 27 de noviembre de 2012

La Copa no interesa

La Copa del Rey vuelve a escena. Es ese conocido inoportuno al que tienes que atender por compromiso, al que tratarás con corrección pero sin esmero. Solo esperas que la cita depare el mínimo daño posible.

Con el Deportivo al borde del descenso y descosido por las bajas, es indiscutible que el torneo del KO no aporta beneficio alguno. Para el rival, gemelo en miserias ligueras, el pase de ronda tampoco es cuestión de vida o muerte. Sin tensión competitiva, al menos podría ser un partido interesante si contase con algún ingrediente llamativo.

No lo es el rival, el Mallorca de Joaquín Caparrós. La mañana del sorteo de los emparejamientos de octavos ningún modesto soñaba con que el bombo le regalase al cuadro balear.

Tampoco encontraremos el interés en la posibilidad de que Oltra se tope con soluciones aplicables en Liga. Cabría pensar, habida cuenta del pobre rendimiento de los titulares, que entrar en el once de gala está barato, que los suplentes podrían ganarse su oportunidad en la Copa. Pero lo cierto es que echar un vistazo al banquillo de San Mamés da una idea de la competencia que existe en la plantilla en este momento. Una sensación corroborada por el partido de ida, donde nadie hizo méritos para convencer al entrenador.

Ni siquiera podemos agarrarnos a un clásico de estas competiciones como la cantera. Siempre resulta apetecible testar a los valores de las categorías inferiores. En esta ocasión, la nómina se reduce a Pablo Insua y simplemente porque las circunstancias obligan. En la ida nos quedamos con las ganas de ver a Juan Carlos y, a pesar de las bajas, difícilmente viajará a Palma el prometedor futbolista del Fabril.

Al margen quedan otras consideraciones, que tampoco ayudan, como el sistema elegido para la competición. Para cuando la Federación acepte el sistema de partido único ya no servirá de nada. La diferencia entre los dos gigantes y el resto de clubes habrá aumentado tanto que no se igualarían las fuerzas ni jugándose la clasificación a piedra, papel, tijera.

En definitiva, una Copa que ya nadie se quiere beber. La supervivencia y la cabeza están en la Liga.

domingo, 25 de noviembre de 2012

Obligados al conformismo

El Deportivo se maneja en unos márgenes de pobreza tales que se ve obligado a saborear el punto de San Mamés como si de la Champions se tratase. El empate apenas alivia los apuros en la clasificación, pero hay que felicitarse porque una holgada victoria local habría sido no solo lo más justo sino lo más normal.

Aun resignados a celebrar la limosna, seguro que muchos aficionados preferirían una derrota de su equipo si ésta llegase con una mejor imagen. Quién no aceptaría cambiar un mísero punto por argumentos para la esperanza.

No los hay, y cada vez menos los esperan. El Dépor reincide jornada tras jornada en la presión contemplativa, una suerte de suicidio que los rivales agradecen encarecidamente. Solo Álex da significado al verbo "encimar". Anticipar, ni en los mejores sueños. Los agujeros por el centro y los rematadores libres de marca completan el paisaje defensivo. La muestra, el tanto de De Marcos, con la vanguardia vizcaína dejando atrás conos de entrenamiento.

En ataque, el planteamiento no pudo ser más benévolo con un Athletic tembloroso al que los de Oltra indultaron por inacción. Apenas intuimos las dificultades de una zaga que disputa a Rayo y Dépor el título de más goleada.

La triste ecuación solo permite dar por bueno el punto y entretener la semana pensando en que un triunfo ante el Betis mejorará el estado del enfermo. Eso sí, en siete días, tal vez sigamos obligados al conformismo.

sábado, 24 de noviembre de 2012

Valentía

"Es la primera vez que se me critica por ser valiente", replica Oltra, de nuevo a la defensiva.

A los entrenadores se les critica, fundamentalmente, por los resultados y el juego. Oltra, afortunado aunque no lo asuma, se ha encontrado en A Coruña con una prensa y una afición capaces de establecer juicios al margen del marcador. Un entorno lo bastante entendido como para destilar la parte positiva de las derrotas y no vendarse los ojos con las victorias.

Así, al Deportivo del ascenso, el de los récords de puntos y goles, se le anotaron los mismos reproches que al tercero por la cola de este año en Primera. A nadie que fuese a Riazor la temporada pasada sorprenderá la fragilidad defensiva durante el presente curso; son los mismos defectos agravados por el cambio de categoría.

Oltra se ha apoyado desde su llegada en una línea argumental opuesta a las de Caparrós y Lotina. Un distanciamento coherente - es cierto que el valenciano comparte poco espacio con sus predecesores - que otorga el favor del aficionado, harto del pasado, con relativa facilidad. Pero abusar del discurso ha generado una expectativa cuyo incumplimiento puede volverse en contra del entrenador. Las estadísticas dicen que el Dépor tiene el balón menos que sus rivales. El "estilo" es más "estilo" en la sala de prensa que en el césped.

La valentía desapareció en Granada, con 0-1 y el rival noqueado, cuando entraron en el campo Álex y Ayoze por Camuñas y Bruno Gama. Un partido que el Dépor debió ganar. Tampoco dio señales de vida contra el Barça, con 3-4 en el marcador y el rival con uno menos. En casa y a media hora del final, Oltra se encontró ante una oportunidad de puntuar que tal vez no vuelva a repetirse. Pero Salomâo sólo entró en el campo tras el 3-5. En Vigo, con 1-1 y el Celta en inferioridad, Nélson entró en el campo... pero por Riki. André Santos, en el 44, sustituiría a Bruno Gama para guardar el empate.

A Oltra no se le critica por ser valiente sino por perder y por cómo pierde. Está dando muestras de no tener capacidad para corregir los problemas defensivos que el Deportivo ya tenía en Segunda o de ser un ingenuo bienintencionado que pretende jugar a lo mismo en dos categorías en las que el rol del equipo es tan diferente.

viernes, 23 de noviembre de 2012

Los abogados que reforman la Concursal, partidarios de eliminar el descenso

La gran pregunta que se hace el deportivismo cuando se habla de Ley Concursal es si acarreará el descenso del club. El grupo de investigación que elabora el Proyecto de Ley que reformará la Ley Concursal por encargo del Gobierno sostiene que el espíritu del concurso es garantizar la continuidad empresarial. Asimismo, estos expertos consideran que un descenso de categoría impide la viabilidad del proceso. Por tanto, y a falta de que en los próximos meses se dé trámite parlamentario al texto definitivo, parece que el documento eliminará la pérdida de categoría que lleva aparejada la solicitud del concurso, teniendo en cuenta la "especialidad" de las entidades deportivas insolventes.

Eso se desprende de las palabras de la abogada especialista en la materia Yolanda Morales, que forma parte de esta comisión, durante la presentación del borrador del texto. Morales asegura que "la licencia - estar en Primera - es la masa activa de la entidad, la riqueza que permite al club arbitrar una salida al concurso. Si existe una sanción - el descenso - que impide esa posibilidad se está dejando sin viabilidad el concurso". En la misma línea se pronuncia otro de los consultados, Juan Carlos Rodríguez Maseda, que indica que "el juez del concurso dictará para garantizar la continuidad empresarial".

El principal objeto de reforma de la Ley Concursal es la "Disposición adicional segunda bis". Este apartado es el que dicta que primará la Ley del Deporte y que, por tanto, y asumiendo el reglamento de la RFEF al respecto, obliga al descenso de categoría. Javier Tebas, presente en 22 de las 27 concursales del fútbol español, y que también participa en la redaccion del Proyecto de Ley, es contundente al respecto de la disposición. Afirma que se trata de una "aberración" y que su vigencia se debe exclusivamente a la presión de la AFE, el sindicato de futbolistas. Durante la presentación del borrador, Tebas reconoce que, como abogado del Valladolid en su proceso concursal, ha "hecho trampas" para evitar el descenso a pesar de la vigencia de esta disposición que podría tener los días contados.

jueves, 22 de noviembre de 2012

El mejor Riki

Riki vive su mejor momento desde que llegó al Deportivo en 2006. Sin el lastre de las lesiones, el madrileño ha superado ya, en apenas un tercio de la temporada, los minutos que jugó en toda la campaña 2010-11. Su ritmo goleador, 4 dianas en 12 encuentros, confirma que la continuidad ofrece resultados, una teoría que hasta ahora apenas había podido probar.

Tiene por delante 26 jornadas para derribar la barrera de los 8 tantos, su mejor registro en Primera tanto en el Dépor como en el Getafe. El otro reto a su alcance es alcanzar los 11 goles de Tristán en la temporada 2005-06. El algabeño es el último jugador que ha superado la decena en el club coruñés.

Siempre criticado, Riki ha ocupado la posición de vanguardia casi en exclusiva en la vuelta a Primera. Y lo ha hecho por méritos propios y a pesar de la corriente mayoritaria que pedía más protagonismo para Nélson Oliveira. Parecía cuestión de tiempo que las prometedoras maneras del portugués convencieran a Oltra, pero lo cierto es que Iván Sánchez no ha bajado su rendimiento y, visto lo visto, ofrece más prestaciones al equipo que Oliveira.

El internacional luso, gran esperanza benfiquista, representa la siempre apetecible promesa del lujo. Superior individualmente, su integración en el fútbol colectivo ha estado por debajo de lo esperado. Se ha mostrado intermitente, por momentos desconectado, poco participativo y excesivamente individualista. Es de ley matizar que ha tenido pocos minutos y que, normalmente, ha saltado al campo con situaciones poco propicias para el lucimiento.

Valga la comparación, en cualquier caso, para revelar que Riki ofrece más salidas al equipo. Domina el juego de espaldas y el desmarque de ruptura; la asociación y la acción individual; el juego de área y el disparo de media distancia. Además, se ha mostrado como un hombre desequilibrante que fuerza con relativa frecuencia tarjetas del rival y faltas al borde del área. El único "pero" en su gran arranque es el gafe desde los 11 metros, con errores ante Osasuna y Levante.



miércoles, 21 de noviembre de 2012

Insua, tarde o temprano

Sería una sorpresa que Pablo Insua fuese titular en San Mamés. El orden es claro y el cuarto central es Roderick, no el canterano, por lo que el portugués formará de inicio junto a Aythami. Al menos, esa jerarquía se desprende del partido de Copa jugado en Riazor y de la propia configuración de la plantilla.

Otra cosa será lo que ocurra en Palma de Mallorca en la vuelta de la Copa la semana que viene. Las 4 tarjetas de Aythami en Liga podrían precipitar el debut de Insua en el corto plazo, por lo que parece aconsejable que Oltra foguee al canterano ante los de Caparrós, en un partido de menor trascendencia que cualquiera en el que haya un fragmento de salvación en juego.

La tercera vía parece la menos aconsejable. Situar a Álex Bergantiños en la defensa sería tocar lo único que funciona realmente bien en el centro del campo. Además, y a pesar de que la trayectoria del coruñés, central en sus inicios, invita a pensar en que rendiría bien, el poderoso juego aéreo de los de Bielsa sería un hándicap en contra de esta opción.

lunes, 19 de noviembre de 2012

Conociendo a Pérez Lasa

Iba a escribir sobre Pérez Lasa, pero el retrato que hace KickTV en este reportaje es insuperable. Son 48 minutos con momentos para el recuerdo, no sólo para conocer al árbitro sino, sobre todo, por su valor como documento de fútbol vivido desde dentro.


jueves, 15 de noviembre de 2012

Unos tanto y otros tan poco

Llega el Deportivo al partido del domingo después de sufrir un mal arbitraje en Zaragoza. El penalti de Tiago Pinto y la expulsión de Pizzi debilitaron de forma notable a un equipo de por sí frágil. Tampoco el Levante aplaudió la labor arbitral en su último encuentro. "Puto robo", dicen los de JIM para calificar lo que vivieron ante el Real Madrid.

Los coruñeses, ya con urgencias, necesitan exhibir en casa una mayor fortaleza defensiva y una agresividad por ahora inexistente. Lo dice la estadística, escuálida en el apartado de faltas cometidas. Sólo el Barça ha cometido menos infracciones en lo que va de Liga. Vuelven para poner remedio, a toque de corneta, Abel Aguilar y Marchena, dos excepciones en un vestuario con más estilistas que guerrilleros.

Las credenciales granotas en esa asignatura, sin embargo, están sobradamente contrastadas. Los números sitúan líder de Primera al cuadro valenciano con 194 faltas, 73 más que el Deportivo. Al ritmo que "pega" el Dépor, necesita 7 partidos más que el Levante para alcanzarlo. Por nombres, el recuento ofrece resultados que no sorprendarán a nadie: Ballesteros suma 6 amarillas mientras que David Navarro acumula 5, "lindezas" del último encuentro al margen.

Para mediar, el Comité Técnico de Árbitros ha designado a un viejo rockero, Pérez Lasa. Sería farragoso recordar todas las batallas en las que se ha cruzado con el Dépor el trencilla vasco, la más célebre el gol anulado a Songo´o en Soria. Que no pase nada...

lunes, 12 de noviembre de 2012

La hora de Oltra

Tras año y medio en Riazor, el Deportivo de Oltra es fácilmente identificable. Se trata de un equipo de dos caras, temible en ataque pero extremadamente frágil en defensa. Un estilo que sirvió para ascender pero que necesita evolucionar para mantener la categoría.

Nadie que haya seguido al Dépor la temporada pasada se puede extrañar de la cuenta de goles en contra de la actual. Simplificando, las facilidades atrás son las mismas pero los rivales son mejores. Para completar la ecuación habría que añadir que la plantilla ha salido perdiendo en defensa con las ausencias de Morel, Colotto y Guardado.

Hace un año, en pleno chaparrón, el técnico se mantuvo impermeable al entorno, fiel a sus propias ideas, tocando el once solo en casos de lesión o sanción. Ahora, los defectos estructurales se saldan con dudas y con una política de cambios más activa. Pero Oltra no encuentra la tecla porque realmente hay poca diferencia entre un jugador y su recambio natural. Ya no vale con poner el foco en Evaldo, Juan Domínguez, Pizzi o Nélson. Son debates secundarios, poco trascendentes. La solución ha de ser táctica y el entrenador está obligado a encontrarla cuanto antes.

El técnico valenciano no puede repetir los errores de su etapa en el Tenerife, al que ascendió a Primera y luego devolvió a Segunda con síntomas clónicos a los que se observan ahora en el Dépor. La experiencia dice que es hermoso morir con tus ideas pero que es más hermoso vivir.

domingo, 11 de noviembre de 2012

Indefensos

El Deportivo amplió en La Romareda su abanico de problemas defensivos. Mostró una capacidad de descomposición preocupante y naufragó a balón parado. La rigurosa expulsión de Pizzi sirve de atenuante, que no de eximente.

Se puso el cuadro de Oltra 0 - 2 en apenas ocasión y media. Agazapado en su campo, al Dépor le bastó una conexión de Pizzi con Bruno y la inteligencia de Riki para sacar petróleo de un Zaragoza que también se desangra desde atrás. Mucho, con muy poco. Un espejismo que ponía el partido muy de cara.

Manolo Jiménez movió la pizarra y fue a por el partido. Los suyos inclinaron el campo y el Depor achicó aguas con relativa suficiencia. Pero cuando agitas un árbol, la fruta madura acaba cayendo y, en una jugada desafortunada, Pinto regaló un penalti.

Tras el 1 - 2, el Deportivo firmó los minutos más brillantes de la temporada. Si la ventaja inicial había sido excesiva, hasta el descanso el equipo coruñés mereció mucho más. Dirigidos por un Álex Bergantiños imperial y con Bruno crecido tras volver a marcar se vio a un Dépor vertical y agresivo, con más balón que el rival y sabiendo qué hacer con él. Álex se estrelló con el larguero, Bruno probó con violencia desde la izquierda y Valerón hizo volar a Roberto. Al descanso, los méritos y los premios quedaban compensados.

Pero llegó la expulsión de Pizzi. El portugués, con una amarilla por protestar, se dejó caer en el área fingiendo penalti. La expulsión revela que el colegiado, Teixeira Vitienes, no ha jugado al fútbol en su vida y que Pizzi es poco maduro para el peso que tiene en el equipo.

En inferioridad, la teoría hablaba de repliegue intensivo y contadas aventuras a la contra. Eso sí, se esperaba cierta resistencia. Pero el muro apenas aguantó la primera embestida y evidenció un nuevo registro de la fragilidad defensiva coruñesa, el balón parado. Resulta inaceptable que el Deportivo reciba tres goles en jugadas de estrategia. La remontada, consumada en tiempo récord, acabó en festín, y golpea doblemente a un equipo que había recuperado parte de su autoestima ante el Mallorca.


viernes, 9 de noviembre de 2012

Desproporción sí, pero...

La avalancha informativa de las últimas horas exigía una explicación y Lendoiro saltó al ruedo para ofrecer su versión de los hechos. Quitó trascendencia al proceso en el que está inmerso el club, presentó a la entidad como víctima de la historia y se negó repetidamente a dar el titular, a reconocer que el Deportivo se encuentra en preconcurso. Sus giros dialécticos recordaron, inevitablemente, a Mariano Rajoy y su catálogo de eufemismos para evitar el término "rescate".

Pero al margen de las formas, Lendoiro admitió que el Deportivo ha incumplido el calendario de pagos con Hacienda y que si en cuatro meses la Agencia Tributaria no da facilidades al club, éste será una sociedad en concurso de acreedores.

El de Corcubión defiende la viabilidad de las cuentas y anima a Hacienda a llegar a un acuerdo, argumentando que para el fisco será más sencillo cobrar si el club camina solo. No es cierto. Al contrario, el concurso sería mayor garantía no solo de cobro sino de cobro íntegro de la cantidad adeudada. Lo que la ley dice es que tanto Hacienda como los trabajadores estarían libres de quitas ya que su deuda está calificada como "privilegiada". Vamos, que en la cola serían los primeros. Otra cosa sería lo que llegasen a percibir el resto de acreedores. El argumento, por tanto, se cae.

No obstante, sí es cierto que el embargo casi total de los ingresos del club resulta una desproporción por parte de Hacienda. El Deportivo solo ha dejado de cumplir con el fisco por culpa del descenso, y ha retomado el calendario de pagos una vez recuperada la categoría a pesar de la delicadísima situación de las arcas blanquiazules. El principio jurídico de proporcionalidad responde a la idea de evitar una utilización desmedida de las sanciones y, atendiendo al caso del Deportivo, parece vulnerado. Repuesto el nivel de ingresos con el ascenso, y por tanto restablecida la capacidad de hacer frente al calendario de pagos con Hacienda, el embargo resulta excesivo.

En definitiva, el Deportivo está en manos de Hacienda, que tiene la sartén por el mango, y tal vez en esta ocasión la habilidad de Lendoiro no baste para esquivar el concurso. Las buenas intenciones podrían haber agotado su crédito.

jueves, 8 de noviembre de 2012

Resetear o seguir huyendo

Las deudas millonarias en nuestro paisaje futbolístico son tan comunes que hemos terminado por aceptarlas como algo normal. Pero la manga ancha con los clubes se ha terminado y el cambio de rumbo de Hacienda hace temblar unas estructuras económicas ya de por sí inestables por su naturaleza insostenible.

El boom de los contratos televisivos hizo creer a los modestos que podían competir con los grandes. Y de hecho, lo hicieron, pero de una forma artificial. Solo unos cuantos clubes en el mundo son capaces de generar ingresos que sostengan la maquinaria en marcha. El resto, se acercó a estos gigantes gracias al dinero de las televisiones. Desinflada la burbuja de los derechos televisivos, el resto de ingresos por taquilla, patrocinios, publicidad, quinielas y merchandising no alcanzan ni para cubrir gastos fijos.

Todavía con sus hábitos de rico, los modestos de la Liga despertaron del sueño con brusquedad. Aplazaron y refinanciaron sus deudas, judicializaron e incumplieron los compromisos de pago entre iguales y, en definitiva, se putearon mutuamente en su doble vida de deudor - acreedor hasta que fueron cayendo, en efecto dominó, uno tras otro. Los procesos concursales, con quitas desmesuradas, terminaron de cavar la tumba de los jugadores de esta economía de casino. Hacienda, mientras, consentía a los clubes acomodando sus calendarios de pago.

La cuestión ahora es saber hasta dónde alcanza la decisión de la Agencia Tributaria de "meter mano" al fútbol. Veremos si se queda en un amago, si el Gobierno se conforma con uno o varios clubes a modo de cabeza de turco o si la crisis aprieta tanto que las medidas se generalizan. De un modo u otro, el fútbol ha de ser consciente de que, sin un modelo sostenible, puede salvar esta pelota de partido, una más, pero estará condenado a encontrarse de nuevo en una situación límite.

Son consideraciones de otro tipo el valor de marca que estas sociedades han conseguido generar o el arraigo social con que cuentan. No son argumentos menores pero, por desgracia, su impacto no tiene cabida en un balance contable.

martes, 6 de noviembre de 2012

El peso del DNI

Semana de luces y sombras para la cantera. Mientras Álex Bergantiños firma su renovación y Juan Domínguez se asienta en el once, Seoane continúa marginado por Oltra y el emigrado Raúl García sonríe en Almería.

La de Álex Bergantiños es la historia de un sueño cumplido, de una carrera de manual que ha quemado etapas a base de fe y paciencia. Deportivista de cuna, ha sabido esperar hasta los 27 años para vestir la blanquiazul en Primera.

Su camino empezó hace 20 temporadas en el Imperátor, en su barrio de la Sagrada Familia, como defensa central. “Koeman” llegó al juvenil del Deportivo el año del Centenariazo y seguiría en casa hasta su primera gran decisión, su pase al Xerez. Con Viqueira como referente en el club azulino y la confianza absoluta de Esteban Vigo, Bergantiños firmó una temporada perfecta y el ascenso. Debutó en Primera con el cuadro andaluz la campaña siguiente a las órdenes del “Cuco” Ziganda. Después vendrían las cesiones al Granada y Nástic y por fin el regreso a Riazor para la temporada del regreso a la élite.

Los fichajes de Jesús Vázquez y Borja relegaban a Álex a tercer plato. Pero el rendimiento pudo más que la eterna duda que pesa sobre los de casa. Compartió con Juan Domínguez el timón del ascenso en una temporada plagada de récords pero fue insuficiente mérito para los desconfiados; querían “verlos en Primera”. Y llegó Primera y los “vieron”. Y vieron a otros. Y al final, resulta no sólo que valen sino que el mejor Depor es el suyo.

Otros no han tenido tanta suerte. El gol de Raúl García con el Almería probablemente no pase de ser una bonita anécdota. Una rareza como el tanto de Manuel Pablo al Mallorca. Sin embargo, nos sirve para recordar que un jugador coruñés que pertenecía al Depor, y que había cumplido en sus minutos en Primera con Lotina, ahora es lateral izquierdo titular del segundo clasificado en Segunda. Mientras defiende otros colores, por la banda de Riazor han desfilado Brayan Angulo, Rindaroy, Morel y todavía lo hacen Evaldo, Ayoze o Tiago Pinto.

Diego Seoane seguirá sus pasos. No vale ni para jugar la Copa del Rey, en la que Oltra prefirió apostar por Manuel Pablo, recién salido de lesión. Cuando el canario se retire, el club fichará a un lateral derecho mientras el de Ourense sube la banda en un sitio donde el DNI no pese.

lunes, 5 de noviembre de 2012

El "9" era Bodipo

Parecía solo cuestión de tiempo y ha terminado por ocurrir. La demarcación con menos efectivos de la plantilla del Depor, la punta de ataque, se queda bajo mínimos con la baja de Nélson, cuya duración revelarán las pruebas médicas.

El eslabón más débil del escaso catálogo ofensivo parecía, por su trayectoria médica más reciente, Riki, y sin embargo ha sido Oliveira el que ha caído. Su pinchazo en el muslo izquierdo garantiza que un hombre que está en la plantilla porque su ficha le impide encontrar acomodo en otro club, vaya a aparecer en los planes de Oltra. Problemas de una planificación excesivamente condicionada por la situación de la entidad.

El Deportivo, acorralado por sus deudas, vive al día y sostiene de forma milagrosa, casi sin apoyos, un proyecto de élite. Con una estructura arcaica centralizada en un puñado de personas, compite con las primeras economías del deporte nacional y con los concursados, biconcursados y hasta triconcursados. Son clubes de la liga del Depor que resetean su deuda de forma periódica para después, a pesar de estar intervenidos, no sólo moverse en el mercado de fichajes sino hacerlo en ventaja.

En este entorno, sin apenas margen de maniobra, y tras la marcha de un tercio de la plantilla del ascenso – Lassad y Xisco, dos delanteros, incluidos –  el Deportivo ha logrado armar una plantilla competitiva aunque con las limitaciones de una planificación tan condicionada. Un riesgo conocido y asumido. Al final, el “9” era Bodipo.

viernes, 2 de noviembre de 2012

¿Alguien se ganó el puesto anoche?

Las oposiciones convocadas por Oltra para ganarse un puesto en el equipo quedan desiertas. El técnico no sufrirá ni para dejar fuera de la lista a los mismos de siempre ni para repetir la alineación habitual.

El mayor atractivo del partido era ver a Nélson Oliveira desde el inicio. Firmó una actuación decepcionante, incapaz de salirse del tono gris general, poco para un futbolista del que se espera mucho más. No dio argumentos al entrenador para sentar a Riki en el banquillo, aunque cabe pensar que rodeado de los "titulares" y en un partido "de verdad" veríamos otra versión del ariete luso.

El otro nombre de la noche era el de Tiago Pinto. El controvertido rendimiento de sus competidores por el puesto de lateral izquierdo hacían del choque copero un examen para él. Como es lógico, el partido apenas sirvió para intuir que no sufre más que Evaldo o Ayoze en defensa y que tiene "maneras" en ataque. En el otro costado, sorprendió la suplencia de Seoane, más si cabe con Manuel Pablo recién salido de lesión.

También resulta llamativo el reparto de minutos de los hombres de banda. Bruno Gama, habitual titular, completó los noventa; Saúl, poco más de una hora de juego. El asturiano no aprovechó la Copa para reivindicarse como sí hizo el año pasado, aunque el resultado será el mismo que entonces, cuando su doblete al Levante no bastó para ganarse un hueco en la convocatoria en Liga.

Roderick Miranda y Aythami cumplieron, sin más, en una posición en la que la parrilla de salida está clara y canario y luso saben que son tercero y cuarto en discordia, respectivamente. En el centro del campo, cuesta evaluar a André Santos mientras que Camuñas, participativo, seguirá siendo el número 12 avalado más por su polivalencia que por su rendimiento. Bajo palos, Lux constató que la portería está bien cubierta en caso de contingencia.

En definitiva, el primer duelo copero ni satisfizo a los curiosos ni aportará grandes conclusiones a Oltra de cara al remake del domingo, con mucho más en juego para ambos.


miércoles, 31 de octubre de 2012

¿Y qué hacemos con Abel?

Transcurrido el primer cuarto de campeonato, los problemas defensivos del Depor en las bandas son "trending topic" de la tertulia futbolera. Las carencias en los carriles han dejado poco espacio para otras miserias que también requieren remedio.

No son menores los desajustes en el centro del campo, en particular en la transición ofensiva. Se ha convertido en común perder el balón en zonas que propician el contraataque rival y que restan continuidad al fútbol de un equipo diseñado para tocar pero obligado a desgastarse en recuperar.

La llegada de Abel Aguilar, cuyo rendimiento individual está fuera de discusión, y la predilección de Oltra por el fútbol combinativo de Juan Domínguez relegaron a Álex Bergantiños al banquillo. Sin más, se rompía una pareja de garantías. El de Narón, un diesel que necesita jornadas para alcanzar un rendimiento adecuado, parecía lento y desubicado sobre el césped. Aguilar, generoso en el esfuerzo, se vio obligado a hacer de Bergantiños y de Domínguez al mismo tiempo.

Pero la baja del colombiano nos devolvió en Balaídos a la pareja "made in Abegondo" y con ella una versión muy mejorada de Juan Domínguez; Álex, siempre regular, ya había sido el más destacado ante el Barça. La dupla autóctona no puso fin al rosario de males que arrastra el Depor pero sí vimos un centro del campo más conjuntado y una creación de juego coherente. Vimos una pareja de dos, no de uno más uno.

Ante el Mallorca, Domínguez tiene la oportunidad de seguir acercándose a su rendimiento de la temporada pasada. Si es así, ¿volverá Aguilar al once cuando esté recuperado?